Qué dice la Biblia ♦ Salvación

Recibiendo la salvación

Desde la perspectiva de Dios, la salvación está hecha. "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios." (S. Juan 3:16-18, RVR1960) Y ofrece salvación a todas las personas que creen en él, confiesan sus pecados y piden su perdón.

"que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado." (Romanos 10:9-11, RVR1960)

Si quieres ser salvo del destino eterno en el infierno, necesitas saber algunas cosas. En primer lugar, Dios es el único Señor y él es quien define lo que es bueno y lo que es malo. No hay otros dioses ni otras normas del bien y del mal, excepto la Biblia.

Entonces necesitas entender que eres un pecador. Todas las cosas que hiciste y todos los pensamientos que tuviste y fueron opuestos a la palabra de Dios, son pecados. No importa si cometiste muchos pecados o menos pecados. No importa si cometiste pecados horribles, o pecados aparentemente pequeños, como mentir u odiar. Un solo pecado es suficiente para convertirte en pecador. Y el castigo por el pecado es la muerte: la muerte eterna en el infierno.

Lo siguiente que debes saber es que no puedes salvarte a ti mismo. No hay manera de deshacerte de tus pecados a través de tu poder. Todos los pecados que cometiste están grabados en tu alma y no puedes limpiarlos con nada. ¡Debes comprender que tu condición es completamente desesperada! ¡No es “una condición difícil”, no es algo así como “parcialmente malo”, sino que es “completamente desesperante”!

Si entiendes las cosas mencionadas anteriormente y te arrepientes de tus pecados, ¡entonces necesitas saber que hay una solución! No hay múltiples soluciones, es sólo una. Esta solución es Jesucristo, el Hijo de Dios, que murió en la cruz por los pecados de todas las personas, incluido el tuyo. Jesucristo es el único camino de salvación, ¡y tú también puedes ser incluido!

Si te arrepientes de tus pecados, ¡ven a Jesús y él podrá lavar todos tus pecados! Él puede restaurar tu vida y convertirte en una nueva persona. Esto es como nacer de nuevo, y está relacionado con tu interior, tu corazón y tu alma. Una nueva persona significa que Dios cambia tu vida por completo y pondrá su Espíritu Santo para vivir en ti y fortalecerte, para poder vivir una vida de acuerdo con la voluntad de Dios.

Si te arrepientes de tus pecados y vienes a Jesús, ¡él te perdonará! No lo dudes y decide hoy seguirlo. No esperes, porque esperar puede hacerte perder esta oportunidad. La Biblia dice claramente que las personas sólo pueden arrepentirse mientras están vivas. Después de la muerte nadie puede hacer nada. Mueres con el destino establecido mientras vivías.

Si aceptas a Jesús como tu Señor y Salvador, y si lo sigues y obedeces su palabra, entonces tu destino estará con Jesús, por la eternidad, en la mayor felicidad y plenitud posible. Pero si rechazas a Jesús, tu muerte confirmará tu destino final en el infierno, en el lugar más horrible que existe. El infierno fue creado originalmente para Satanás y sus ángeles, pero también es el destino de todas las personas que rechazan a Jesucristo.

Jesús dijo: "Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar." (S. Mateo 11:28, RVR1960)